Leer permite volar, creer que la fantasía se transformará en realidad. Así, la imaginación dibuja miles de imágenes personales e irrepetibles. Entonces es posible encontrarse en otro mundo, ser otra persona. Los libros hacen llorar, reír, emocionarse, conocer otras personas y costumbres, descubrir otras culturas e historias, aprender nuevas palabras y leyendas.

La maternidad y la paternidad son funciones que se complementan y se desenvuelven en el marco de una estructura cultural y familiar.Desde el punto de vista biológico, el papel del hombre es el de conservar la especie. Pero la conducta humana excede esta función y aunque en la mayoría de las culturas el padre tiene un rol secundario en la crianza de los hijos, no se puede decir que la madre sea la única capacitada para criar a su descendencia.

Cuando una pareja decide esperar un tiempo determinado para tener hijos o, directamente, no procrear, debe utilizar métodos anticonceptivos.

El psicólogo Donald Winnicott definió como una “madre suficientemente buena” a la que es capaz de filtrar los estímulos excesivos, acompañar al bebé con su sostén y presentarle el mundo, apaciguando la angustia intensa que lo acompaña en esta temprana etapa.

 

Toda pareja tiene derecho a decidir si tener hijos o no, cuántos, en qué momento o cada cuánto tiempo. Este tema, en la actualidad, es abordado por distintas organizaciones de salud, pertenecientes a diferentes ámbitos, que crean programas especiales que orientan a la población general. En este boletín veremos algunas consideraciones para conocer más acerca de la procreación responsable.

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