Cada vez son más los padres y maestros que comprenden lo importante que es introducir a los niños en el mundo de los libros. En la actualidad, los libros están presentes en las habitaciones de muchos niños. Pero no solo es en el hogar o en la escuela donde se ve esta tendencia: hoy en día, la mayoría de las librerías cuenta con un espacio especial para los más pequeños. Esto se debe a que invitar a los niños a descubrir el maravilloso mundo de los libros y de la lectura es un verdadero desafío.
lectura compartida

Leer cuando se es adulto requiere de tiempo, silencio y soledad. Leer cuando se es pequeño requiere de compañía, voces y dedicación por parte de los mayores. Para que un niño pueda conocer el contenido de un libro, es vital la presencia de un adulto que le relate la historia.
En los cuentos infantiles, las ilustraciones son lo más importante, pero el adulto, al relatarlas, les da vida y hace que la historia sea mágica, atrapante y cargada de afecto, lo que convierte a la palabra en un instrumento vital para comunicarse y también para disfrutar.
Los libros son puertas abiertas que invitan a conocer el mundo creado por otras personas: la lectura es comenzar con la aventura del conocimiento. A menudo suele escucharse decir que “los niños no leen”; entonces, ¿cómo ayudarlos, cómo estimularlos a que descubran el seductor mundo de los libros?
Para quienes gustan de la lectura, es impensable vivir sin libros. Aunque muchas personas descubren los libros ya siendo adultos, la mayoría de los grandes lectores se forma desde pequeños. Sin embargo, tal vez no sea que “los niños leen cada vez menos”. Muchos adultos ya no leen y por eso piensan que los pequeños leen menos. Hoy día, el mundo está lleno de mensajes escritos: textos digitales, mensajes de texto, carteles, subtítulos de películas, páginas de Internet... En realidad, se leen otras cosas, pero se leen pocos libros, lo cual es una lástima, porque estos últimos encierran un mundo que sólo se revela cuando se abre.
¿Qué hacen los padres para que los niños se interesen por los libros? ¿Qué hacen para que leer se transforme en una actividad natural y placentera? Los padres deben ser un modelo lector para los niños. Si eso no sucede, hay pocas posibilidades de lograr que el pequeño considere la lectura como una actividad tan placentera como practicar deportes o ver su película favorita.

Construir el hábito

La lectura es un hábito y es en la niñez cuando se sientan las bases de la conducta de manera natural y espontánea. Los libros deben estar siempre presentes, al igual que los juguetes. Es recomendable armar una pequeña biblioteca infantil para que el niño pueda elegir un libro cuando lo desee.
El niño que empieza a tener contacto con los libros desde pequeño, incluso antes de saber leer, hojeando los libros, se encontrará mejor preparado para los estudios y en la vida en general, ya que así se estimula su concentración y su actitud de búsqueda.
Además de darles la posibilidad de abrir una ventana, liberar la imaginación y abrir una puerta al descubrimiento, los libros son un elemento vital en la educación.

 

Véase Escuela para padres

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